Una manera excelente de promover una cultura del matrimonio en una parroquia es incluir a las parejas casadas y a las familias en las intercesiones generales cada semana, y rezar para que los jóvenes disciernan bien la vocación al matrimonio. Las intercesiones siguientes se han recopilado de varias fuentes en línea y pueden seleccionarse para usar en la oración de los fieles. No duden en adaptar cualquiera de ellos a las necesidades locales.

El Papa, los obispos, los sacerdotes, los diáconos y los ministros eclesiales laicos

Por el Papa Francisco: para que nuestro Padre Celestial le otorgue una sabiduría profunda y amor filial para que guíe a la Iglesia a reverenciar el matrimonio y la familia. Roguemos al Señor.

Por nuestro obispo (nombre aquí): para que proclame a los hombres y mujeres de nuestra diócesis la belleza del diseño de Dios para el amor conyugal. Roguemos al Señor.

Por los obispos: para que puedan guiar con valentía a la Iglesia a promover y fortalecer el matrimonio y la vida familiar en medio de una cultura secular que no aprecia la bondad y la belleza del matrimonio cristiano. Roguemos al Señor.

Por los obispos: para que se sientan alentados en su enseñanza de la verdad liberadora de Cristo sobre el matrimonio, tal como lo diseñó el Creador. Roguemos al Señor.

Por los sacerdotes y diáconos: para que el Espíritu Santo les dé el poder para enseñar el diseño de Dios para la vida y el amor. Roguemos al Señor.

Por nuestros sacerdotes y diáconos: para que el Espíritu Santo les ayude a guiar a hombres y mujeres a recibir el don del sacramento del matrimonio dentro de la Iglesia. Roguemos al Señor.

Por los ministros eclesiales laicos: para que el Espíritu Santo los anime y fortalezca a compartir la verdad de Dios sobre el matrimonio y la vida familiar con todos a quienes sirven. Roguemos al Señor.

Por los ministros laicos: para que el Señor Dios les dé las palabras para enseñar Su verdad sobre la naturaleza del matrimonio como la unión permanente entre un hombre y una mujer. Roguemos al Señor.

Por los líderes de la Iglesia: para que se dejen guiar por el Espíritu Santo para seguir proclamando el significado singular del matrimonio entre un hombre y una mujer como signo de la unión entre Cristo y su esposa, la Iglesia. Roguemos al Señor.

Por el Papa Francisco, los obispos, los sacerdotes y todos los fieles: para que nos fortalezcamos por la gracia del Espíritu Santo para proclamar la dignidad de toda vida humana desde la concepción hasta la muerte natural, el significado singular del matrimonio y la importancia de libertad religiosa para todos. Roguemos al Señor.

Iglesia / Comunidad Parroquial

Por nuestra parroquia: para que las familias que vienen a misa puedan sentir nuestro amor, acogida y gratitud por el don de su presencia aquí. Roguemos al Señor.

Por nuestra parroquia: para que fomentemos una apreciación renovada del don del matrimonio y la vida familiar, y animemos a todos a celebrar la belleza de este sacramento. Roguemos al Señor.

Por nuestra parroquia y comunidad: para que promovamos y defendamos el hermoso don del matrimonio y la dignidad de toda vida humana desde la concepción hasta la muerte natural. Roguemos al Señor.

Por todo los matrimonios y familias en nuestra parroquia: que se esfuercen diariamente por dar testimonio del amor de Dios al construir una iglesia doméstica en Su nombre. Roguemos al Señor.

Por nuestra parroquia y comunidad: para que, como familia de familias, encontremos maneras de cuidar a las parejas casadas y apoyar a nuestras familias como iglesia doméstica. Roguemos al Señor.

Por la Iglesia, la Esposa de Cristo: para que siga proclamando al mundo el amor de Jesús su Esposo a través del testimonio vivo de los matrimonios. Roguemos al Señor.

Funcionarios gubernamentales y la política pública

Por el Presidente de los Estados Unidos y los líderes gubernamentales: para que Dios Padre les otorgue una reverencia profunda por el papel sagrado de los padres de familia y les ayude a promulgar leyes que salvaguarden el vínculo entre padres e hijos. Roguemos al Señor.

Por los responsables políticos de nuestra nación: para que sus decisiones sean guiadas por el Espíritu Santo para priorizar siempre el papel de la familia. Roguemos al Señor.

Por nuestra parroquia y nuestro país: para que seamos cada vez más conscientes de la dignidad de toda vida humana desde la concepción hasta la muerte natural, la belleza del plan de Dios para el matrimonio y la importancia de la libertad religiosa plena y auténtica. Roguemos al Señor.

Por todos aquellos que ocupan cargos elegidos: para que defiendan y promulguen leyes y políticas que promuevan y preserven la dignidad del matrimonio como la unión permanente, fiel y exclusiva de un hombre y una mujer. Roguemos al Señor.

Por todos los que nos sirven en cargos elegidos: para que promulguen leyes y políticas que defiendan la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural, la dignidad del matrimonio como la unión fiel, permanente y exclusiva de un hombre y una mujer, y la auténtica libertad para todos. Roguemos al Señor.

Buscar, discernir o prepararse para el matrimonio

Por todas las personas cuyo profundo deseo de amar y ser amados en la vocación del matrimonio no se ha cumplido: para que Dios les dé fortaleza, paciencia y confianza de que sus vidas ya dan frutos del amor, al colaborar generosamente con Él cada día. Roguemos al Señor.

Por las parejas que están considerando casarse: para que se puedan abrir al Señor Dios en su relación para discernir Su voluntad para ellos. Roguemos al Señor.

Por las parejas que están discerniendo casarse: para que el Espíritu Santo les ayude a abrir sus corazones y mentes al diseño de Dios para la vida y el amor. Roguemos al Señor.

Por las parejas que están considerando casarse: para que el Espíritu Santo los lleve a comprender el valor e importancia de casarse en la Iglesia. Roguemos al Señor.

Por los novios comprometidos: para que den testimonio de la verdad del amor matrimonial comprometido en el mundo. Roguemos al Señor.

Por los novios comprometidos: para que crezcan en las virtudes de la fe, la castidad, la fidelidad y la caridad. Roguemos al Señor.

Por las parejas comprometidas: para que, en medio de las actividades de la planificación de su boda, puedan dedicarse a preparar sus corazones para el Sacramento del Matrimonio. Roguemos al Señor.

Por los novios comprometidos: para que disciernen el Sacramento del Matrimonio con corazones abiertos a la voluntad de Dios para su familia. Roguemos al Señor.

Por todas las parejas que se están preparando para el sacramento del matrimonio: para que esta temporada de noviazgo profundice su fe, esperanza y amor, y los acerque al Sagrado Corazón de Jesús, fuente de vida y santidad. Roguemos al Señor.

Por todos aquellos que están discerniendo su vocación: para que sean guiados en el corazón por el Espíritu Santo para reconocer y responder al llamado de Dios. Roguemos al Señor.

Por todos aquellos que están discerniendo una vocación al matrimonio: para que reconozcan al Espíritu Santo en sus corazones y respondan generosamente al llamado de Dios. Roguemos al Señor.

Por todos aquellos que se están preparando para el matrimonio: para que estén rodeados de amigos y testigos que puedan ayudarles a discernir y crecer juntos como pareja. Roguemos al Señor.

Por todos los que están discerniendo una vocación al sacerdocio, a la vida consagrada o al matrimonio: para que el Señor guíe sus corazones y aclare Su voluntad para sus vidas. Roguemos al Señor.

Por nuestra familia parroquial, especialmente aquellos preparándose para su boda: para que comprendan bien la dignidad y las responsabilidades de la alianza matrimonial y la vida familiar. Roguemos al Señor.

Parejas casadas

Por todos los matrimonios que celebran un aniversario este mes: para que su amor mutuo siga fortaleciéndose. Roguemos al Señor.

Por todas las parejas recién casadas que comienzan su vida en común: para que tengan la asistencia divina en cada momento, el apoyo constante de familiares y amigos, la rica bendición de tener hijos, un amor cálido que se dirige a los demás y buena salud hasta una edad avanzada. Roguemos al Señor.

Por los matrimonios: para que den testimonio de la verdad y la belleza del designio de Dios sobre el amor conyugal y, al hacerlo, sean instrumento para la conversión de los demás. Roguemos al Señor.

Por los hombres y mujeres casados: para que su unión conyugal revele el amor de Cristo a sus familiares, amigos y vecinos. Roguemos al Señor.

Por las parejas casadas: para que Cristo los lleve a comprender los dones del sacrificio y del perdón a medida que crecen en el amor mutuo. Roguemos al Señor.

Por los hombres y mujeres casados: para que Dios les dé la gracia de acoger vida nueva en sus familias. Roguemos al Señor.

Por las parejas casadas: para que puedan mirar a San José y a la Santísima Madre como sus patrones para establecer familias santas, llenas de fe, esperanza y amor. Roguemos al Señor.

Por las parejas casadas: para que cuando traigan hijos al mundo, crezcan en su comprensión de que su hogar es una “iglesia doméstica” porque la fe católica nace y se cultiva en el hogar. Roguemos al Señor.

Por los hombres y mujeres casados: para que estén abiertos a aceptar hijos de Dios. Roguemos al Señor.

Por todos los matrimonios: para que sus vidas den testimonio de la belleza de la vida matrimonial como participación en el amor de Dios e inspiren valentía a quienes disciernen su vocación. Roguemos al Señor.

Por todos los matrimonios: para que se esfuercen diariamente por vivir fiel y amorosamente sus promesas matrimoniales, dando testimonio del amor que Dios tiene por cada uno de nosotros. Roguemos al Señor.

Por todos los matrimonios cuyas vidas dan testimonio de la grandeza del amor y de la fidelidad de Dios hacia cada uno de nosotros: para que perseveren en su compromiso, particularmente en medio de sufrimiento o dificultades. Roguemos al Señor.

Por las parejas que aprenden y utilizan la Planificación Familiar Natural: para que en su fidelidad al diseño de Dios para el amor conyugal experimenten paz y una renovación de su amor. Roguemos al Señor.

Por todos los matrimonios: para que sigan viviendo su vocación de amor como ejemplo para sus familias y para el mundo del amor fiel, fecundo y duradero de Dios. Roguemos al Señor.

Por todos los matrimonios: para que encuentren a Cristo en lo cotidiano de su matrimonio. Roguemos al Señor.

Por los matrimonios: para que reflejen el amor de la Santísima Trinidad en sus hogares, en sus familias y para con sus amigos. Roguemos al Señor.

Por los cónyuges en nuestra comunidad: para que se entreguen sinceramente el uno al otro y a sus hijos y que sean transformados por el poder de la cruz. Roguemos al Señor.

Por los maridos y las esposas: para que se vieran a sí mismos como corresponsables de su familia, su hogar y sus posesiones. Roguemos al Señor.

Matrimonios en dificultad o enfrentando retos

Por los matrimonios que sufren dificultades en su relación: para que perseveren y crecen en el amor y la fidelidad del uno hacia el otro. Roguemos al Señor.

Por todos aquellos que sufren problemas o heridas en su matrimonio: para que puedan llegar a conocer la sanación y el perdón a través del amor infinito del Padre. Roguemos al Señor.

Por todas las parejas que tienen problemas en su matrimonio: para que encomienden a sí mismos y a su familia a las manos amorosas de Dios, Creador y fuente de Amor. Roguemos al Señor.

Por todos aquellos que sufren de matrimonios difíciles o rotos: para que sean fortalecidos por la gracia del sacramento que han recibido en matrimonio y obtengan la asistencia que necesitan para su sanación. Roguemos al Señor.

Por todas las personas casadas que han sufrido una separación: para que experimenten el amor y la sanación de Dios y descubran que Él todavía tiene un plan hermoso para sus vidas. Roguemos al Señor.

Por aquellos que han perdido a su cónyuge: para que la tierna compasión del Padre y de la Santísima Madre los consuele en su momento de dolor y les traiga una paz que sobrepasa todo entendimiento. Roguemos al Señor.

Por todos los matrimonios que luchan por tener un hijo: para que el Señor les conceda paz y consuelo, confianza en su Providencia y fortaleza renovada en su amor. Roguemos al Señor.

Por todos aquellos que anhelan dar la bienvenida a un hijo mediante la adopción: para que el Señor guíe su camino hacia la paternidad y les conceda paz en el camino. Roguemos al Señor.

Por todas las parejas que cuidan a sus padres ancianos: para que reciban los dones de sabiduría y comprensión para continuar en este servicio. Roguemos al Señor.

Por todas las parejas que no conocen a Dios: para que escuchen la buena noticia de que Él quiere ayudarlos a amar como ellos desean amar. Roguemos al Señor.

Padres de familia

Por los padres de adolescentes: para que se les dé gracia, paciencia y comprensión mientras guían a sus hijos hacia la edad adulta. Roguemos al Señor.

Por los padres de niños pequeños: para que la Sagrada Familia les ayude a modelar alegría, paciencia y esperanza duradera en medio de estos primeros años. Roguemos al Señor.

Por los padres de hijos con necesidades especiales: para que encuentren aliento en los momentos difíciles y la presencia de Cristo en la Eucaristía para alimentarlos a ellos y a sus hijos. Roguemos al Señor.

Por los padres de hijos con discapacidad: para que su comunidad sea modelo de la actitud acogedora e inclusiva de Jesús, buscando siempre ver la imagen de Dios en cada persona. Roguemos al Señor.

Por los padres de familia que no se sienten bienvenidos en la misa con sus hijos: para que conozcan nuestro amor y el amor de Jesús que siempre invita a los niños chiquitos. Roguemos al Señor.

Por todos los padres de familia que luchan a solas por criar a sus hijos: para que Dios les dé la fortaleza de los hijos de Dios y el apoyo de su santa Iglesia. Roguemos al Señor.

Por los padres y madres solteros: para que puedan recibir una doble porción de la fortaleza y el consuelo del Señor. Roguemos al Señor.

Por los padres tentados a darse por vencidos: para que Dios les dé la sabiduría y la determinación que necesitan para seguir adelante. Roguemos al Señor.

Por los padres de familia que lamentan la muerte de un hijo: para que se les dé la fortaleza y la valentía para enfrentar el futuro, y para que sean comprendidos y bendecidos. Roguemos al Señor.

Por los padres de familia cuyos hijos están cuestionando su fe: para que el Espíritu Santo les conceda sabiduría para responder con gentileza y amor. Roguemos al Señor.

Por los padres cuyos hijos han abandonado la fe: para que, por intercesión de Santa Mónica, se sientan inspirados a levantarlos en oración y confiar a sus hijos a la providencia de Dios. Roguemos al Señor.

Por cada padre y madre solteros y por sus hijos: para que, con la gracia de Dios, su amor los una y la verdad los preserve y proteja. Roguemos al Señor.

Padres de familia nuevos o futuros

Por los maridos y esposas que recientemente han gozado el nacimiento de un hijo: para que el Señor de la Vida los bendiga y les proporcione todo lo que necesitan para criar a su bebé. Roguemos al Señor.

Por las nuevas madres y padres: para que el Espíritu Santo pueda inspirar a familiares, amigos y vecinos a echar una mano. Roguemos al Señor.

Por todas las futuras madres y padres que se preparan para recibir el don de la vida: para que sean animados y apoyados en su papel de primeros educadores de sus hijos y primeros modelos de vida cristiana. Roguemos al Señor.

Por todas las parejas que enfrentan embarazos inesperados: para que el Señor les dé paz, esperanza y amor por sus hijos y unos por otros, contando con nuestro apoyo. Roguemos al Señor

Por todas las madres, especialmente aquellas que están embarazadas: para que reciban el apoyo de sus seres queridos y amigos cercanos, y que sean comprendidas y bendecidas. Roguemos al Señor.

Para las futuras madres: para que reciban los dones de paciencia y gozosa esperanza. Roguemos al Señor.

Por las madres embarazadas y los padres de hijos por nacer: para que se regocijen en la noble vocación que Dios les ha dado. Roguemos al Señor.

Por las madres y los padres en espera del nacimiento de su hijo: para que Dios llene sus corazones cada día con un amor cada vez más profundo. Roguemos al Señor.

Por las madres y los padres que por primera vez tienen a un hijo entre brazos: para que sean transformados por la maravilla que abrazan. Roguemos al Señor.

Por los padres, especialmente los que son muy jóvenes: para que, por intercesión y ejemplo de San José, asuman la gran responsabilidad que Dios les ha dado. Roguemos al Señor.

Por las familias cuyo hijo no nacido no se espera que sobreviva mucho tiempo: para que encuentren fortaleza y paz en el apoyo de los demás y conozcan la cercanía de Jesús. Roguemos al Señor.

Por todas las familias en espera de un hijo en la misa de hoy: para que podamos regocijarnos con ellos en el don inestimable que Dios nos trae a través de su amor. Roguemos al Señor:

Madres

Por las madres jóvenes en todo el mundo, y especialmente por aquellas se sienten desesperadas: para que, a través del bebé que llevan por dentro, conozcan la esperanza y la alegría. Roguemos al Señor.

Por las madres, especialmente aquellas que enfrentan miedo, depresión o desesperación: para que la nueva vida de sus hijos las toque con el amor eterno de Dios. Roguemos al Señor.

Por las madres jóvenes tentadas a abortar a su hijo: para que la gracia de Dios les dé la sabiduría y la fortaleza para conservar el don inestimable que llevan por dentro. Roguemos al Señor.

Por cada madre que ha sufrido un abortado espontáneo: para que su amor por el hijo de su vientre la libere del dolor y la une a la esperanza de la Cruz de Cristo. Roguemos al Señor.

Por todas las madres que están de luto por la pérdida de un embarazo: para que encuentren consolación en el duelo al recordar la conexión espiritual que siempre tendrán con sus hijos. Roguemos al Señor.

Por todas las madres –madres naturales, madrinas, abuelas, madrastras, madres biológicas, madres adoptivas, madres de guarda, madres espirituales y aquellas que son madres de otra manera– para que sean apoyadas y alentadas en su vocación especial de amor. Roguemos al Señor.

Por todas las madres que esperan el nacimiento de sus hijos: para que el Señor las proteja y lleve a sus hijitos a un parto seguro. Roguemos al Señor.

Para las madres que enfrentan un embarazo inesperado: para que encuentren la fortaleza y valentía en el ejemplo de nuestra Santísima Madre. Roguemos al Señor.

Por las madres que lloran la pérdida de un hijo: para que encuentren paz y consuelo en la esperanza de la vida eterna. Roguemos al Señor.

Parejas infértiles

Por los matrimonios que tienen dificultades para lograr el embarazo: para que se les concedan la gracia para comprender el plan de Dios para su amor conyugal. Roguemos al Señor.

Por los matrimonios infértiles: para que tengan una confianza renovada en el Señor, de manera que Él les revele su voluntad. Roguemos al Señor.

Por los matrimonios infértiles: para que nuestro Padre Celestial consuele sus corazones y les ayude a discernir cómo compartir su amor matrimonial en su comunidad. Roguemos al Señor.

Por todas las parejas que llevan la cruz de la infertilidad: para que sean consoladas por el abrazo maternal de la Madre de Dios y bendecidas con fecundidad espiritual. Roguemos al Señor.

Familias

Por todas las familias: para que den testimonio del amor incondicional de Dios. Roguemos al Señor.

Por las familias: para que cada miembro se llene de un espíritu de hospitalidad para dar la bienvenida al extranjero en sus hogares. Roguemos al Señor.

Por las familias: para que, siguiendo el modelo de la Sagrada Familia, vivan el amor admirable de Cristo. Roguemos al Señor.

Por las familias: para que vivan siempre en el amor de la Santísima Trinidad y, al hacerlo, sean luz de Dios para el mundo. Roguemos al Señor.

Por las madres, los padres y los hijos: para que se amen y se apoyen unos a otros como lo había ordenado San Pablo, en santa armonía unos con otros. Roguemos al Señor.

Por todos los miembros de la familia: para que, mediante un amor generoso, fomenten las vocaciones al sacerdocio, la vida religiosa, el matrimonio y el ministerio eclesial laico. Roguemos al Señor.

Por las familias que sufren debido a enfermedades, pobreza, violencia u otras dificultades: para que su comunidad parroquial les imparta esperanza, apoyo y alivio. Roguemos al Señor.

Por las familias que abren sus hogares y corazones para acoger a los niños adoptivos o de crianza: para que puedan reflejar el amor duradero de Dios Padre por nosotros, sus hijos adoptivos. Roguemos al Señor.

Por las familias que se esfuerzan por comprender y ayudar a sus seres queridos con enfermedades mentales: para que encuentren paz en Cristo Sanador y apoyo en nuestra comunidad parroquial. Roguemos al Señor.

Por las familias que han perdido a un ser querido a causa de una enfermedad mental: para que tengan consuelo al confiar en la misericordia de Dios para recibir a su ser querido enfermo. Roguemos al Señor.

Por las familias que están en duelo: para que Dios Padre los consuele y les conceda gozo en la esperanza de una vida eterna en Él para sus seres amados. Roguemos al Señor.

Por las familias de niños con discapacidades: para que encuentren un hogar acogedor con nosotros en la Iglesia católica. Roguemos al Señor.

Por las familias de personas con discapacidades: para que su fe continúe siendo una fuente de fortaleza, comunión y esperanza. Roguemos al Señor.

Por nuestras familias: para que sean una fuente por la cual tu amor crezca, acojan a los hijos, refugien a los que sufren y los solitarios, sirvan a su comunidad y compartan la belleza. Roguemos al Señor.

Por un amor fecundo: para que todos los matrimonios que han compartido la obra creadora de Dios disfruten del don de sus hijos y nietos. Roguemos al Señor.

Por todos los que sufren por causa de un matrimonio problemático o roto, especialmente los niños: para que sientan la seguridad de la ternura inagotable de Dios Padre hacia ellos. Roguemos al Señor.

Niños

Por los hijos: para que sean fuente de bendiciones para sus padres. Roguemos al Señor.

Por los niños: que el corazón de todas las personas los aprecie, valore y proteja. Roguemos al Señor.

Por los niños: para que mantengan un corazón y una alegría propio de los niños para adelantar el reino de Dios. Roguemos al Señor.

Por los niños: para que, siguiendo las huellas de Cristo, los tratemos con amor, bondad y respeto por su inocencia. Roguemos al Señor.

Por los niños con discapacidades: para que sean amados y cuidados por sus familias y vecinos. Roguemos al Señor.

Por todos los niños en hogares de acogida: para que nuestra comunidad los reciba en nuestras familias y les muestre el amor misericordioso del Padre. Roguemos al Señor.

Por los niños con discapacidades: para que el Señor Dios los proteja y guíe a sus padres para cuidarlos bien. Roguemos al Señor.

Por los niños que están enfermos: para que el Espíritu Santo los consuele y fortalezca a sus padres para ayudarlos. Roguemos al Señor.

Por los niños que están enfermos: para que el Señor Dios los sane y los rodee de médicos y enfermeras cariñosos y competentes. Roguemos al Señor.

Por los niños que sufren: para que reciban la ayuda de sus familias y amigos. Roguemos al Señor.

Solteros/Juventud

Por las personas solteras: para que desarrollen un conocimiento profundo de sí mismos para que cuando Dios les muestre su vocación, puedan entregarse y seguirlo. Roguemos al Señor.

Por los jóvenes: para que Nuestra Santísima Madre y San José los guíen a una relación más profunda con Jesús. Roguemos al Señor.

Por los jóvenes: para que haya adultos sabios y fieles que los ayuden a entender y aceptar las enseñanzas de la Iglesia sobre la castidad, el matrimonio y la vida familiar. Roguemos al Señor.

Por los hombres y mujeres solteros: para que se les conceda la gracia y la fuerza para practicar las virtudes de la castidad, la templanza y la fidelidad en una época y una cultura que representan una amenaza para el estilo de vida cristiano. Roguemos al Señor.

Por los hombres y mujeres solteros: para que Jesús maestro los lleve a estudiar, reflexionar y aceptar el plan de Dios para el matrimonio y la vida familiar. Roguemos al Señor.

Por los solteros: para que vivan castamente y amen con corazón recto e íntegro. Roguemos al Señor.

Por los hombres y mujeres solteros: para que el Espíritu Santo les dé la fortaleza para resistir toda forma de tentación y aceptar con esperanza el plan de Dios para el matrimonio, la vida y el amor. Roguemos al Señor.

Abuelos

Para los abuelos, tíos y tías: para que su amor incondicional pueda nutrir y preservar la vida de cada niño no nacido. Roguemos al Señor.

Para los abuelos que están criando a sus nietos: para que Dios los sostenga y recompense por su bondad y fe. Roguemos al Señor.

Por los padres y padrinos ancianos: para que el amor y el respeto de sus hijos los sostengan y les traigan alegría. Roguemos al Señor.

Por los abuelos: para que mediante su oración y ejemplo puedan enseñar a sus nietos la bondad y belleza de vivir el Evangelio de la Vida. Roguemos al Señor.

Cuidadores

Por los cuidadores: para que mientras avanzan en la jornada de ayudar a un ser querido, sepan que su Padre celestial está con ellos en cada paso del camino. Roguemos al Señor.

Por los cuidadores familiares, a veces asustados o desanimados: para que sepan que antes de la fundación del mundo han sido amados por el mismo Dios que ahora les pide su ayuda en el cuidado de un miembro de la familia. Roguemos al Señor.

Por los cuidadores familiares: para que, en sus muchas distintas formas de servicio, encuentren valor y consuelo por los dones del Espíritu Santo. Roguemos al Señor.

Por todos los cuidadores y quienes reciben su cuidado: para que se deleiten unos en otros, así como Dios –el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo– se deleita en cada uno de nosotros. Roguemos al Señor.

Por la vida

Para que la fe católica despierte en los corazones de todos los católicos un renovado sentido de reverencia y gratitud por el don de la vida humana, y una determinación renovada de proteger todas las vidas desde la concepción hasta la muerte natural. Roguemos al Señor.

Por aquellos en el otoño de sus vidas: para que sus familias y cuidadores los aprecien y cuiden con tierna compasión, rechazando la promesa falsa del suicidio asistido. Roguemos al Señor.

Por todos los que viven en asilos de ancianos, especialmente aquellos que están solos o sufren dolor: para que podamos apreciar el don de su sabiduría y su ejemplo duradero de fe. Roguemos al Señor.

Por aquellos con discapacidad intelectual: para que podamos apreciar los dones que Dios les ha dado y escuchar en sus vidas la voz de nuestro Dios amoroso. Roguemos al Señor.

Por las mujeres y los hombres que sufren después de un aborto: para que el ministerio de sanación de la Iglesia les ayude a encontrar la paz en la misericordia infinita de Dios. Roguemos al Señor.

Por los padres de familia y abuelos que han perdido a un hijo a causa del aborto: para que Dios los consuele en su aflicción y los guíe al perdón y la sanación en la confesión y por medio del ministerio Proyecto Raquel de la Iglesia. Roguemos al Señor.

Por todos aquellos que sufren enfermedades físicas o mentales, por sus cónyuges, familiares y cuidadores: para que por la intercesión de Nuestra Señora encuentren fortaleza, paz y sanación. Roguemos al Señor.

Por el respeto y protección de la dignidad de cada persona humana desde la concepción hasta la muerte natural. Roguemos al Señor.

Por los niños no nacidos: para que sean recibidos con amor en este mundo por sus familias, amigos y la comunidad local. Roguemos al Señor.

Por todos los católicos: para que seamos canales de la misericordia de Dios al amar a cada persona y celebrar el don de su vida. Roguemos al Señor.

Por nuestros vecinos, compañeros de trabajo, amigos, hermanos cristianos y todas las personas: para que incrementen su apoyo a las familias y lleguen a reconocer que toda vida humana es un regalo de Dios y un motivo de alegría. Roguemos al Señor.

Salud mental

Por aquellos que sufren una enfermedad mental: para que puedan encontrar la fuerza para buscar ayuda para comenzar a sanar y que tengan paz en sus vidas y la comprensión y aceptación de los demás. Roguemos al Señor.

Por todos los que han contemplado o intentado suicidarse: para que el Espíritu Santo inunde sus corazones con el amor de Cristo y les dé la fuerza para pedir ayuda. Roguemos al Señor.

Por todos los que se sienten solos, aislados, ansiosos o vacíos: para que el Señor en la Eucaristía llene sus corazones con su presencia y les ayude a encontrar la comunidad. Roguemos al Señor.

Por todas las personas que enfrentan discriminación y estigma debido a enfermedades mentales: para que encuentren acogida y aceptación como sarmientos de la vid de Jesús. Roguemos al Señor.

Por todas las personas que —o ellas mismas o dentro de sus familias— viven con crisis mentales y emocionales: para que el gozo y el amor de Jesús les brinden consuelo. Roguemos al Señor.

Por aquellos que están en recuperación de adicciones y buscando tratamientos que les permitan regresar a una vida plena: para que encuentren consuelo en Cristo quien los fortalece. Roguemos al Señor.

Violencia doméstica

Por todas las personas en relaciones abusivas: para que experimenten el amor de Dios y sepan que su abuso no es la voluntad de Dios. Que encuentren en nuestra comunidad parroquial la valentía y el apoyo para buscar ayuda, encontrar seguridad y liberarse de la violencia doméstica. Roguemos al Señor.

Por las mujeres y hombres que son víctimas de violencia doméstica: para que Dios los ayude a liberarse del abuso y vivir seguros en la paz de Cristo. Roguemos al Señor.

Por aquellos que sufren violencia doméstica: para que sepan que no están solos, que son amados y que la ayuda está tan cerca como una llamada telefónica. Roguemos al Señor.